El Mono Burgos en el semáforo de la corrección política
El gancho a la mandíbula fue perfecto y el oponente se desplomó en el acto. Habría sido un gran KO si hubiera sido un combate de boxeo, pero aquello era un partido de fútbol. Sucedió sin que ninguna cámara lo captase —eran otros tiempos— durante un Español-Mallorca de 1999 y el puñetazo de Germán Burgos, alias el Mono Burgos, a Manolo Serrano supuso una de las sanciones más altas en