Jenni Hermoso mentirosa

Jenni Christmas y feliz Año Nuevo

Es muy probable que las navidades pasadas el nombre de Jenni Hermoso le sonara tanto como el de Volodímir Zelenski antes de la guerra de Ucrania, o sea, nada. Y eso que es una gran futbolista y la mayor goleadora de la selección nacional —Zelenski no, la otra—, pero, claro, hay que ser aficionado al fútbol femenino para saberlo. Y como existen más aficionados a la cría de caracoles que

Jenni Hermoso

¿Qué pasa con el fútbol femenino?

Hay que remontarse a 1988 para encontrar la única ocasión en que un equipo de fútbol masculino de élite se rebelara en España. Fueron los jugadores del Barcelona en el motín del Hesperia, donde denunciaron un trato humillante del entonces presidente, José Luis Núñez, atreviéndose a sugerir su dimisión. En el fútbol femenino ya llevan una huelga contra la Liga y han montado la de Dios es Cristo contra la

Jenny Hermoso mentirosa

El beso de Rubiales

Desde el beso de Judas no ha habido otro que la haya liado más gorda. El beso de Rubiales ha provocado un escándalo mundial hasta niveles insospechados y ha borrado de un plumazo el mayor éxito del fútbol femenino en España. Ya nadie habla de la copa del mundo ni de los golazos de Salma Paralluelo y Olga Carmona. Lo que podría haber sido el gran espaldarazo del fútbol femenino